El Contactismo

 

Fuente imagen: mundoesotericoparanormal.com

El Contactismo:

Sus elementos, mitos y realidades

Hablar del contactismo en la investigación de los “no identificados” es un tema que genera enormes rechazos en el común de los investigadores que se autodenominan ufólogos. No por nada, pues desde que inició la época moderna de los OVNI (objetos voladores no identificados), han tenido que lidiar con muchos casos en los cuales los testigos afirmaban tener algún tipo de relación con estas entidades, sin embargo aparentemente no existían tales. Pero afirmar que todos los casos obedecían y obedecen, en la actualidad, a esta categoría, es una barbaridad.

El contactismo involucra muchos elementos en su funcionamiento, es más complejo de lo que parece, no tener claro estos elementos, para un testigo que puede llegar a experimentar este fenómeno, sin duda alguna que podría ser un tanto peligroso. Los peligros radicados en mentalismos y posibles “desvaríos” que podrían llevar riesgos a la integridad física.

El contactismo, para que pueda quedar claro, es el contexto en el cual un sujeto determinado entra en una relación de tipo “amistosa” con una entidad que dice proceder de otra realidad, esta “relación” se puede dar de diversas maneras, todo dependerá directamente de la agenda de la entidad y en consecuencia el protocolo que iniciará con el testigo. Las maneras más comunes son:

  • Contacto Directo (físico).
  • Contacto Telepático y/o Psicográfico.
  • Contacto en sueños.

Al observar cada uno de estos modos de contacto es difícil que el panorama sea del todo claro, pues al margen de la hipotética realidad, de estas experiencias, existe una probabilidad muy alta que estas vivencias sean falsas o un desvarío, sin embargo medir todo con el mismo juicio indudablemente que es casi tan delirante como las probabilidades antes mencionadas.

Para profundizar más en el proceso, estos 3 tipos de contacto (no son los únicos pueden ser más).  La clasificación que se puede realizar es la siguiente:

  • Contacto Directo.
  • Contacto Indirecto.

El contacto indirecto en el cual está asociado el contacto telepático, psicográfico y las experiencias del astral (sueños), la entidad o emisor tiene la posibilidad de entregar algún mensaje con objetivos claros, los medios son desconocidos pues la telepatía se genera en un medio que desafía la física actual, esto según la siguiente definición:

La telepatía es la transmisión de contenidos psíquicos entre personas sin que intervengan agentes físicos conocidos. El concepto también se utiliza para nombrar a la coincidencia de pensamientos o sensaciones sin el concurso de los sentidos, lo que hace pensar que existe algún tipo de comunicación de características desconocidas. (Autores: Julián Pérez Porto y Ana Gardey. Publicado: 2011. Actualizado: 2014. Definicion.de: Definición de telepatía [https://definicion.de/telepatia/])

 

La más controversial de las experiencias con no identificados es la que será parte de este artículo y hace alusión a la “Psicografía”. En términos prácticos es el fenómeno de escritura automática inducida, de forma consciente, por medio de la telepatía. Todo este fenómeno es gatillado siempre por alguna entidad de la cual, en la actualidad, solo se conoce que tiene facultades psíquicas más desarrolladas.

Este fenómeno o experiencia tiene ciertos elementos que no todos (investigadores y quienes experimentan el suceso) logran comprender o identificar. Los elementos son los que enumeraremos a continuación:

  1. Emisor o entidad.
  2. Canal
  3. Antena o recepcionador.
  4. Mensaje
Ilustración 1
                                                                                                                                                       Ilustración 1

 

Estos cuatro elementos (Ilustración 1) a la vista de cualquier distraído pasan totalmente desapercibidos, pues no es fácil, erróneamente por parte de muchos testigos, este fenómeno en su totalidad es atribuido a la magia u otras explicaciones fantásticas, y hasta delirantes.

Para comenzar a analizar de manera más objetiva, rompiendo los paradigmas del fenómeno, se explicarán en términos sencillos cada uno de los elementos.

 

Emisor o Entidad

El Emisor o Entidad, en términos prácticos es un ser que independiente de su procedencia tiene méritos psíquicos desconocidos con el cual logra transmitir alguna información, independiente del contenido de esta última, siempre con una intención.

La “intención” siempre viene acompañada de una agenda o propósito y además de un protocolo. Un protocolo es una especie de manual de acción, de una entidad con el testigo, existen eventos que experimenta el testigo que no son casuales, vienen dados por este protocolo. El funcionamiento del protocolo de contacto de un testigo es muy variable (puede ser limitado o directo) por razones ligadas directamente al testigo, por ejemplo, no todos los testigos de contacto pueden soportar un encuentro físico directo con otra entidad, podrían afectar negativamente o no saber sobrellevar su propia experiencia, pudiendo caer en la ridiculización social o en eventos traumáticos.

A la intención siempre va ligado un resultado al cual esta entidad desea llegar, al igual que en el planeta es imposible pensar que fuera de este, las supuestas entidades sean todas iguales tanto en apariencia como propósito. Obviamente un ser con intenciones nocivas para el testigo no repara en el cuidado que este debe tener, pero esto es tema de otra historia. Las entidades que tienen a menudo contacto benignos con testigos, actúan siempre por una motivación, difundir algún mensaje o información tiende a ser el principal motivo, pero debemos hacer la diferencia, toda información que transmiten, siempre es un nuevo conocimiento o el enriquecimiento de otro, jamás es una reiteración de una información o conocimiento ya sabido. Esto último es la diferencia entre una entidad real o la imaginación. Nunca dejar de lado el sentido común por la irracionalidad, las entidades siempre son seres racionales. Si lo llevan a este escenario, qué caso tiene llamar a un amigo de una misma ciudad, para decirle que es de día.

Un emisor benigno, siempre tiene determinadas características que al ojo de cualquier persona y más aún ante el testigo, no pueden pasar desapercibidas. Un ente o emisor tal como todos los seres racionales poseen rasgos reflejados en la interacción, a medida que el contacto se extiende por el tiempo, estas características comienzan a quedar al descubierto. Las características son las siguientes:

  • El emisor jamás se negará a identificarse, se lo pidamos o no, siempre dará su identidad aunque por agenda esté limitado, dará al menos un alias, para interactuar con el testigo. Toda entidad no identificable, es un posible mentalismo o interferencia.
  • El emisor siempre tiene un propósito, una intención. Ningún ser racional se comunica con otro por nada, siempre existe un fin.
  • El emisor siempre quiere entregar una nueva información o completar otra, también, toda advertencia siempre está acompañado a un mensaje de apoyo, sucede en eventos complejos, jamás se entrega una nueva información para desalentar.
  • El emisor procura la integridad física y mental del testigo, jamás arriesgarán al testigo, esto sería un despropósito con su intención “positiva”.
  • Ligado al anterior punto, el ente siempre es positivo.
  • El emisor siempre es claro, preciso, siempre alienta a la investigación, a conocer, explorar, no busca generar dependencia ni mucho menos ignorancia.
  • El emisor es el responsable de la comunicación. El testigo solo es responsable del cómo usar la información. Esto es para romper el paradigma de: “El talentoso”, “él tiene un don”, “él es especial”. Jamás confundir una experiencia autentica y genuina con “delirios mesiánicos” de “muchos” pseudo testigos de contacto, quienes dicen ser los responsables del contacto. Apenas tenemos la capacidad de recibir la información, y aun así, siempre muy llena de nuestros patrones mentales, paradigmas, condicionamientos, etc.

Canal

El canal de la comunicación o contacto, en el caso de los contactos telepáticos-psicográficos, es muy difícil de determinar, pues tal y como una definición anteriormente entregada, estos pensamientos, información, viajan por medios desconocidos para la física.

Suponiendo que viajan por una frecuencia “especial” pero desconocida, esta frecuencia genera una especie de ambiente o puente la cual podría ser afectada por muchísimas fuentes, entre ellas el lugar físico donde el testigo se pueda encontrar.

Existe una enorme “coincidencia” en los múltiples testigos que afirman haber sido invitados para recibir algún mensaje, incluido un encuentro directo, en terrenos alejados de la ciudad, por motivos no muy evidentes las ciudades tienen esos elementos que pueden llegar a interferir en un contacto con una entidad de otra realidad.

Hasta este punto proseguir seria redundar, sin embargo existe un elemento que no podemos olvidar. – ¿Hasta dónde llega el canal? ¿Es todo lo exterior al ser humano o existe también en su interior? –

Tal parece indicar que el canal se extiende hacia nuestra propia mente, es por ello que no siempre se facilitan las condiciones para un contacto con otra entidad, pues entonces como se podrían explicar recepciones muy claras y precisas de un testigo, al interior de una gran ciudad. Por algún motivo, explícito, la primera experiencia siempre se da en un estado en el cual el testigo está muy relajado.

Para mencionar de modo más gráfico, el “terminal del canal” sería equivalente a un enchufe que ingresa en nuestra cabeza, claro que esto es metafórico. Por lo tanto muchos potenciales testigos podrían ignorar totalmente que están siendo contactados por otra entidad, debido a que su “enchufe” o “puerto” está sucio, cerrado o bloqueado. Las preguntas obvias radican en la razón del posible bloqueo y la respuesta es que pueden ser múltiples razones las que se enuncian a continuación:

  • Nula apertura mental.
  • Paradigmas.
  • Estrés.
  • Ruidos o interferencias mentales.
  • Desconexión interna.

Detallar cada uno de los anteriores no se realizará, esto es parte del trabajo, a la investigación personal que cada uno de los potenciales lectores debe hacer.

Antena

Antena, su nombre resuena de forma extraña y tal vez delirante, pero este nombre viene asignado directamente a sus características. – Antenas endebles, poco desarrolladas no captan bien las señales – A título de quien redacta.

Una antena o testigo, en el fenómeno del contactismo en cualquiera de sus escenarios, es quien recibe la experiencia. Esta no es más que un paquete de información que se genera por estímulos de diversos tipos, y en consecuencia procesados por el testigo. Este último paso fundamental, pues del procesamiento sale la experiencia en su máxima expresión, ya sea por relato, en el caso el contacto directo y/o telepático, y el mensaje psicográfico que sale en contactos indirectos.

Para profundizar más, una persona, un testigo de contacto, debe tener muchas características que lo hacen ser bastante singular. Primeramente ser tremendamente autocríticos y jamás dejarse de preguntar a sí mismos, ser exigente con el mensaje, ser exigente con el emisor, asumir la responsabilidad que esto conlleva pues no es un juego.

Una antena de un bajo compromiso, lleno de paradigmas, malas costumbres, malas prácticas u otras suciedades mentales tiende a canalizar mensajes lleno de ruidos internos, poco claros, ambiguos, ajustado a “sus creencias”, o simplemente no canalizar a nadie, y lo que es peor, canalizarse a “si mismo” en una profunda alucinación.

El receptor siempre debe ser abierto a la crítica y sobre todo a la autocrítica, pues debe ser el primer filtro de una comunicación, una comunicación que no le resuena o no le convence, debe suprimirla para evitar confusiones o mala información.

La antena debe ser sumamente exigente con el emisor, pues el emisor debe dar las facilidades y la claridad a la antena, para que este último pueda identificar primeramente al emisor, y con esto poder recepcionar de forma clara, y contundente.

Uno de los ejercicios más simples de un antena es la de cuestionarse a sí mismo, en múltiples escenarios esto parecería ser una tontería, sin embargo es todo lo contrario, un antena siempre debe preguntarse el porqué de un contacto. Debemos recordar que estas entidades desean ayudar, no existen canalizaciones personales o  que fomenten la egolatría, cada comunicación debe siempre tener un propósito plenamente identificado, no existen las canalizaciones porque sí. A dudar de todos los vicios de una mala antena.

Existen aspectos de una antena que todos debemos considerar, la antena siempre tiene paradigmas o ciertas estructuras mentales que pueden generar ruido a la hora de comunicarse, es muy difícil determinar quién es mejor antena que otro pues las condicionantes anteriores no logran generar un parámetro comparable entre testigos.

Una buena antena siempre busca la corroboración del mensaje recibido no existen mensajes no corroborables, tampoco existen los mensajes absolutistas, esto último quiere decir un mensaje con el 100% de la verdad redactada. Todos los cientos o miles de testigos de contacto reciben solo fracciones de una verdad, piezas o parámetros del mismo. Es responsabilidad de la antena unir las piezas y encontrar las otras faltantes.

 Mensaje

Dentro de los aspectos más importantes o relevantes es siempre el resultado final, pues es en este desenlace donde quedan plasmadas todas las directrices de una entidad que dice provenir desde otra realidad. Los mensajes se ajustan directamente a una antena, dependen mucho del desarrollo de este último.

Los mensajes están muy sujetos al receptor, se quiere decir que es este último quien decodifica un impulso u onda mental, dos sujetos pueden recibir el mismo impulso, sin embargo la decodificación puede ser distinta, por ejemplo un emisor envía mensaje de saludo a dos sujetos (A y B).

  1. A es un sujeto de habla inglesa decodificando el saludo como: Hello!
  2. B es un sujeto de habla hispana, decodificando el saludo como: ¡Hola!

El mensaje en su completa extensión siempre debe ser analizado, nunca la totalidad de un mensaje es una canalización literal del ente emisor, pues el receptor siempre posee aspectos, ya sea de formación personal o profesional que pueden incidir en la recepción del mismo. Es por lo anterior que todos los mensajes o canalizaciones deben ser puestos inmediatamente bajo análisis, primeramente de parte de la antena misma y seguido del colectivo pues se debe ser sumamente críticos, el mensaje por lo general va dirigido a un grupo de personas, por ende es de su completa responsabilidad analizar el contenido del mensaje.

Continuando con el análisis de un mensaje, tal como es una herramienta de registro, el testigo y el grupo al cual vaya dirigido el contacto, es una fuente rica en información.

Un mensaje psicográfico o canalización no es propiedad de nadie, mucha atención con canales que se apropian de ciertos contactos, apropiarse de un contacto no siempre es restringir el acceso a este, también es la supresión de información que puede ser relevante.

El mensaje también revela mucho de la antena, del canal y del emisor, por medio del registro se puede evaluar de forma muy precisa:

  • Si el mensaje realmente es objetivo.
  • Si el mensaje no es la neta expresión, paradigmas o delirios de la antena.
  • Si el mensaje no es mal utilizado, como medio de justificación a un desvarío de la antena o grupo.
  • Si el mensaje tiene coherencia adecuada a una buena antena y canal limpio.
  • Si el mensaje no es una simple repetición de patrones ya sabidos.
  • Si el mensaje es realmente un mensaje.

Si el mensaje es realmente objetivo: muchas veces en relación a la experiencia, los mensajes traen consigo informaciones que no a todos gustan, pues vienen cargados de elementos que buscan derribar paradigmas o mitos que se dan por hechos, un mensaje realmente objetivo no necesariamente es una afirmación o repetición de algún conocimiento previo, es obvio, un mensaje debe contener información nueva no una repetición de conocimientos propios del antena, se debe tener extremado cuidado con este punto, pues se relaciona a los próximos puntos a tratar. Por lo general existen mensajes que impactan tanto a la antena o al grupo de contacto, o trabajo (en caso que se esté trabajando en un colectivo), el impacto viene porque se entrega información:

  • Corroborable.
  • Nueva y/o evolución de un conocimiento previo.
  • Corrección de algún paradigma o mal proceder.
  • No siempre es lo que creemos.

Cuando elementos antes mencionados aparecen en un mensaje deben ser puestos en análisis y consideración, pues es ese el mensaje autentico, en un porcentaje puede haber un 1% de autenticidad y el resto pueden ser ruidos mentales propios de la antena.

También el mensaje no siempre es lo que deseamos leer o confirmar, siempre trae una carga importante en cuanto la evolución del individuo o grupo, pues un mensaje busca siempre transmitir algo diferente que ayude a comprender a conciencia, con certeza. Sin conocimiento no existe conciencia.

Si el mensaje no es mal utilizado, como medio de justificación a un delirio de la antena o grupo: Este aspecto es uno de los más críticos dentro de la evaluación directa que se puede hacer de un mensaje, tristemente en un increíble dislate existen mensajes que han sido mal usado con fines variados y no benignos. En la historia del contactismo los mensajes han sido usados por muchos grupos, algunas sectas altamente peligrosas, en los cuales se dice canalizar fin de los tiempos, incitación a la violencia, el suicidio colectivo, etc.

También un mensaje puede ser usado de forma intencional o “casual” por una mala antena para justificar una serie de hechos irreales, por ejemplo insistir que la tierra es plana y por el hecho del posible descredito, mágicamente recibir de una entidad, muchas veces exaltada o exagerada (Jesús, ángeles, etc.) para generar mayor crédito,  y así justificar que la tierra realmente es plana. Se podría generar desinformación.

También existen grupos que por medio de un “delirio colectivo” generan patrones acordados, muchas veces de forma no intencionada, el cual es confirmado en todas las comunicaciones. No necesariamente la recepción de “la mayoría” es un mensaje autentico, a veces responde a patrones definidos dentro del grupo de trabajo en cuestión, por ejemplo, un grupo que trabaja muy de la mano con matemáticas, y reciben siempre matemáticas, – ¡a autoevaluarse! –, pues es muy propenso a aflorar desvaríos en sus supuestas canalizaciones.

Si el mensaje no es una simple repetición de patrones ya sabidos: Este punto es muy relacionado al anterior, pues muchos grupos que sufren de desvaríos tienden a recibir pseudo confirmaciones de conocimiento que ya la antena o grupo poseían.

— ¿Por qué una entidad que desea informar, repetirá algo ya sabido?—

Se debe tener extremada precaución, porque tal y como se dejó claro en el punto anterior un mensaje puede ser usado como medio de justificación a una distorsión mental.

Nunca olvidar: “Un mensaje siempre busca transmitir un nuevo conocimiento, corregir o completar otro”.

Si el mensaje es realmente un mensaje: Esto puede sonar de lo más ridículo u obvio, pero — ¡Así es!—. Un mensaje debe ser evaluado usando todas las herramientas que con anterioridad se han entregado, en este punto se debe ser muy críticos y autocríticos, no todo lo que brilla es oro por más que deseamos creerlo, si las evaluaciones y consideraciones que hasta este punto han sido pasadas exitosamente, felicidades pues se “podría” estar frente a un mensaje autentico, sino, hay que examinar con pinzas la comunicación pues no sería un elemento muy confiable.

Como conclusión

Un genuino contacto resume un conjunto de elementos que en un inicio pueden no identificarse plenamente. El ejercicio del análisis y evaluación de la veracidad de la comunicación recibida forma parte de la responsabilidad y de un constante trabajo que debe asumir quien contacta. No es un tema que se deba tomar a la ligera, pues la información recibida obedece a una necesidad y a un objetivo que incluso puede escapar a nuestra comprensión, y por lo tanto, amerita cierta seriedad y compromiso.

Asimismo, terceras personas que estén involucradas en los mensajes, o que reciban la información por medio de alguna difusión, de igual forma deben incluir este filtro a la hora de analizar la información. Pues no es poco habitual que mucha de la información “recibida” sea afectada por interferencias mentales y, en consecuencia, el mensaje sea “contaminado”. Por tanto, debe existir una educación mental a la hora de procesar una información y disponer de una visión crítica para filtrar elementos que puedan observarse a la hora de analizar dicho mensaje, sea quien sea el receptor de dicha información.

Autores: Ricardo Gatica, Felipe Astorga

   

Autor

  • Ricardo Gatica Sanhueza

    Ingeniero informático y experto en automatización QA (Quality Assurance), ha dedicado su vida a la exploración de fenómenos aéreos no identificados. Desde Santiago de Chile, combina su rigurosa formación técnica con una pasión por lo desconocido. Aunque comenzó su trayectoria en grupos de contacto durante su juventud, hoy se define como un explorador crítico de estos fenómenos. Su enfoque profesional, alejado de las interpretaciones fantásticas, lo ha llevado a investigar tanto lugares reconocidos como otros que permanecen en las sombras. ¿Qué hay detrás de estos sucesos? Ricardo afirma con firmeza que una inteligencia se oculta tras el fenómeno, esperando ser comprendida. ¿Quieres conocer más sobre su trayectoria? Visita su biografía completa en el enlace a continuación con éste símbolo: 🔗

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